
Final de Recomendamos Si esto te suena conocido, es posible que algo te pueda ayudar. A lo largo de una serie de estudios de seguimiento, Huang descubrió que hacer preguntas marcaba una diferencia significativa en la simpatía que se generaba entre las personas. Fuente de la imagen, Getty Images Pie de foto, Haz preguntas, pero recuerda que no todas las preguntas son igualmente encantadoras. Una de las razones de esto es el egocentrismo. Fuente de la imagen, Getty Images Curiosamente, la investigación de Epley ha demostrado que nuestro egocentrismo es peor cuando estamos con un conocido, en lugar de con un extraño, un fenómeno llamado sesgo de comunicación cercana. Familiaridad vs.
Nuestro instinto nos lleva a revisar experiencias propias similares a las que cuenta nuestro interlocutor. Y entonces esperamos que acabe de contarlo -sin escuchar demasiado- para poder contar lo nuestro. Esa es la base de todo lo que viene a continuación. No quieras parecer interesante. No funciona. Una tiempo le oí decir a alguien que no hay nada menos sexi que alguien intentando ser sexi.
Aquende tienes algunos temas para todas las ocasiones. Muchos dicen que es un arte y a fe que tienen razón porque no todo el globo tiene temas de conversación interesantes. Especialmente en estos tiempos, cuando escasean los encuentros cara a cara y las palabras tienden a ser sintéticas en extremo. Una buena conversación debe apalabrar sobre temas que despierten el interés de ambos interlocutores. Para que sea una conversación realmente ambos deben adeudar la oportunidad de escuchar y de hablar.
Lo recuerdo bien. Las vivía como poco muy incómodo. Una sala enorme con mesas altas con comida mientras grupos de tres o cuatro personas que ya se conocían charlaban en corrillo. Tener 22 años y estar rodeado de hombres desconocidos vestidos con golilla y expresión seria puede ser intimidante. Por fortuna he aprendido mucho. Todo era un juego y si poco te ponía nervioso solías interpretarlo como emoción, no como miedo.